Como ya he señalado en diversas ocasiones, los estudios sobre los gobiernos de coalición (y sobre las coaliciones políticas) en España son aún demasiado escasos. Y ello es especialmente sorprendente tras la celebración de elecciones como las del mes pasado, de ámbito autonómico y local, en la que las dinámicas coalicionales aparecen con toda su intensidad.
Tenemos la suerte de contar con una multiplicidad de casos que habrían de ser terreno abonado para la generalización de estudios, tanto de caso como comparados, de dichos procesos de formación de gobierno.
Particularmente hoy quiero llamar la atención sobre el caso balear, en el que la actuación de UM (Unió Mallorquina) y de su líder, Mª Antonia Múnar, está ofreciendo en cada proceso electoral verdaderas lecciones de negociación interpartidista y de rendimiento coalicional envidiable por muchas formaciones políticas. Bien es cierto que la insularidad juega un papel muy importante -como por otro lado también lo juega en el caso canario- pero la capacidad de decisión y de maniobra de UM en relación a CC es absolutamente distinta.
Ahora que por fín las clases se terminaron y los examenes casi también, espero poder ahondar en las experiencias coalicionales surgidas tras estas elecciones, por lo que animo a quien esté interesado a colaborar abierta y solidariamente con el análisis.